Nos acercamos a las elecciones de federación más importantes del último tiempo. Estas elecciones, sumergidas en la nebulosa del conflicto estudiantil, tomarán el pulso de lo que será la política universitaria, al menos de los próximos 2 años (hasta las elecciones presidenciales). En efecto, el influjo del movimiento estudiantil marcará uno de los procesos eleccionarios más feroces. Hoy más que nunca el estudiantado se hará parte de manera efectiva de la conducción de la Federación de Estudiantes.
El NAU (Nueva Acción Universitaria) llega a esta carrera con la primera posición. Por un lado, la figura aún popular de Giorgio Jackson los deja varios pasos por delante de los otros movimientos. Por otro lado, la ausencia de la Opción Independiente (Oi) les entregaría al menos un 10% de votos con los que el año pasado no contaban. No obstante, la ausencia de la Oi puede ser un arma de doble filo: el NAU ha transitado progresivamente hacia la izquierda mientras que los votantes Oi orbitan más bien en torno al centro y a posiciones más moderadas. La capitalización de los votos Oi por parte del NAU dependerá, en gran medida, de qué tanto estén dispuestos a transitar hacia la izquierda. Asimismo, la imagen que los otros movimientos estampen sobre el NAU –Crecer los alejará de la izquierda, mientras que Solidaridad y el Movimiento Gremial (MG) los hará parecer como radicalizados y lejanos del centro—influirá en si son finalmente capaces de hacerse con los votos pro-Oi. Por lo pronto, la lista del NAU conjuga buenas cartas en territorios claves como Lo Contador, Educación y Humanidades pero es débil en cuanto a Derecho y el bloque científico.
Desde la otra esquina, la derecha universitaria también enfrentará una elección decidora. Al igual que el NAU, parte del voto Oi (aunque con un máximo del 10%) podrá repartirse entre gremiales y solidarios con una leve tendencia más hacia los naranjos que hacia los rojos.
A primera vista, las precampañas indican que la derecha lo está apostando todo por el centro político. Mientras Solidaridad ha echado mano de conceptos que hasta el año pasado eran propios de la Oi como el rechazo al eje izquierda-derecha y la política binaria, el gremialismo ha apostado por figuras que marcan un guiño evidente hacia posiciones más liberales de lo que el movimiento más antiguo de la UC había acostumbrado, aunque sin dejar de lado sus nexos con el electorado más conservador y cercano a la pastoral.
Solidaridad, por su parte, llega a las elecciones con una muy potente lista, pero con ciertas dudas en su aproximación a Ingeniería Civil (25% de los votos totales de toda la elección). En efecto, es precisamente esta carrera la que podría definir si Solidaridad pasa o no a segunda vuelta y tal definición dependerá principalmente de la fórmula que conjuguen Vanessa Muñoz (candidata a la 2da vicepresidencia) y el respectivo candidato a consejero territorial.
El Movimiento Gremial se asoma con una lista más bien de liderazgos internos y otras figuras "estratégicas" que les permiten permear desde la pastoral hasta los sectores liberales (¿será el génesis de un gremial-liberalismo?). Si bien no tienen líderes que hayan marcado una oposición mediática al NAU durante este año en el Consejo de Presidentes, la ausencia de la Oi y la debilidad de Solidaridad en Ingeniería transforman a Juan José Silva (presidente de Lista 1a) en un candidato excepcional para alcanzar la FEUC 2012. De esta manera, el nuevo piso histórico del MG no debería bajar el 25%. Gremiales y Solidarios definirán quién pasa a segunda vuelta en el grueso de los votos de Ingeniería Civil, y bajo este criterio, la Lista 1a tiene una leve ventaja sobre Solidaridad. No obstante, esta podría tener resultados muy favorables en Derecho (por Correa y Stewart), Agronomía (por Valdivieso) y un mejor planteamiento en Humanidades frente al MG que contrarresten la ofensiva gremial en Ingeniería Civil.
La plataforma de estudiantes de izquierda –Crecer—llega en una muy buena posición a estas elecciones FEUC. Sin lugar a duda, son la izquierda más organizada e institucionalizada de los últimos años. Llegan con candidatos potentes (Simón Ramírez, el actual líder, quien ha sido presidente de su centro de estudiantes y consejero de su territorio) y podrían superar sin mayores problemas la barrera del 15% (lo mismo que sacó Solidaridad el año pasado). La izquierda tiene una oportunidad histórica de pasar de un movimiento "testimonial" a uno electoralmente competitivo que le provoque un dolor de cabeza al NAU en territorios claves, especialmente en "las dos tomas": Oriente y Humanidades.
No obstante, el NAU sigue siendo un movimiento irreductible y la carta de Titelman (candidato a presidente) con todo su arrastre en Humanidades como ex presidente del CEL y delegado CONFECH, no le dará espacio al Crecer para pasar a segunda vuelta. Aún así, Crecer saldrá a jugar en una situación que les acomoda: pondrán en duda quiénes son los más adecuados para darle coherencia al movimiento estudiantil en la UC: ¿ellos o el NAU?
Finalmente, Caridad volvería a irrumpir este año y es especialmente difícil predecir cuál será el efecto. Por un lado, parecería que la política universitaria de este año está más "densa" y menos propensa a bromas, situación que acabaría con quitarle apoyo a la lista que se ríe a las otras listas. Por otro lado, quizás el hastío de la politización de este año y la constante sátira de los otros movimientos por parte de ChicoPUC podría potenciar a Caridad para alcanzar al menos el 7% del año pasado.
Tal como mencionó Jorge Ramírez en El Puclítico hace algunas semanas, la brecha entre la política nacional y la política chica –nuestra política universitaria—está en franca disminución. Pero no solo eso, estas elecciones FEUC no solo tendrán el obvio efecto a nivel de universidad sino que también podrían dar un golpe de timón respecto a la participación de la UC en el CONFECH y por consiguiente en el movimiento estudiantil. Sin lugar a duda, el resultado de estas elecciones les interesarán a muchos más que los estudiantes UC, y con justa razón, pues sus efectos se sentirán mucho más allá que en los cinco campus.
¡No nos restemos de estas elecciones históricas!
Equipo El PUClítico
Equipo El PUClítico